Los exosomas tienen un gran potencial en el cuidado de la piel, ya que poseen propiedades antiinflamatorias e inmunomoduladoras. Además, contienen moléculas que no solo promueven la cicatrización, sino también la hidratación y la síntesis de proteínas de la matriz extracelular, como el colágeno y la elastina.
Por otro lado, ofrecen una protección adicional para la piel, aportando beneficios terapéuticos y antienvejecimiento. De esta manera, los exosomas mejoran integralmente la salud y apariencia de la piel.